jueves, 22 de abril de 2021

Mi vecina la neni #4 ✿

 Disculpen la demora. Tuve unos días muy ocupada y no pude actualizar. Pero espero poder aunque sea poner uno cada semana. Espero les agrade la continuación y sean pacientes.

Me encantan sus comentarios y su recepción, la verdad no me lo esperaba después de tanto tiempo para una historia que solo hice por diversión probando algo nuevo. Los quiero mucho, un gran saludo... Corrin ❤️

========================================

Cerré la puerta y baje por la escaleras. Eran los primeros pasos que daba, cada escalón era toda una experiencia, se movía todo todo, cada paso hacia que rebotará absolutamente todo, carne por todos lados, partiendo de las piernas que hacían que ese par de nalgas se menearsn de acá para allá, a la vez que ambos pechos daban pequeños tirones dentro del brassiere, que ayudaba a qué se controlaran pero todo recaía en los tirantes en los hombros, terminando por el cabello que se movía de una forma más pronunciada que me provocaba incomodidad al darme comezón y cosquillas, cubriendo mi vista.

Al tener menos estatura y unas piernas más cortas, no podía bajar tan rápido, tenía que ir escalón por escalón.


Jugando, aumentaba y disminuía la velocidad con la que bajaba las escaleras, apreciando todas esas nuevas sensaciones que explotaban mi mente, toda esa ropa hacia que todo se amplificara de forma extraña pero agradable. 

Me faltaba aún un piso por bajar cuando me sentí cansado, tuve que tomar un poco de aire y unas gotas de sudor recorrieron mi frente. Era una sensación de agotamiento, sin duda era una gran diferencia la energía de mi cuerpo, que aunque no era atlético, estaba delgado, a este cuerpo ya mas viejo y pesado.


Me detuve un poco a descansar y los últimos escalones los baje más tranquilo.

Ahí en el estacionamiento estaba un carro algo viejo, de dónde escuché el claxon sonar.

Ahí estaba yo, asomándome por la ventana.


-"Hay vecinita, que guapa. Al parecer vienes más recatada, pero aún así te vez bien. Camara, ya súbete al carro"

Trate de no prestarle atención, pero aún así me ponía nervioso, mas al oír mi cuerpo hablar así. Abrió la puerta desde dentro y me metí al auto.

De nuevo pude experimentar esa sensación de sentarme sobre un trasero de gran tamaño, seguía siendo raro sentir tanta carne abajo y que me diera más altura, trate de acomodarme un poco.


-"Mírate nomás, si te tardaste un rato, que tanto hiciste?"

-"Pues nada, cubrirme, que no iba a salir tan desparramada como estabas."

-"Jajaja, pero te faltó algo, a ver espera"

Del asiento trasero saco una mochila rosa, las puso en mis piernas y de ahí extrajo varias cosas, mucho maquillaje.


-"A ver, vamos a ponerte al 100. Cierra los ojos".

Ya solo quería que terminara, así que rápido lo hice. Comenzó pasando una especial de brocha por las pestañas, mojandolas un poco, siguio con una esponja que pasó por toda la cara, estaba a punto de estornudar, siguió con algo que se sentía como una esponja en un palo y lo frotó sobre los párpados para después pasar un tipo de lápiz por la orilla del ojo.

Solo podía sentir la presión de todos sus utensilios sobre la piel y el como cada uno dejaba una capa algo suave por encima.


-"A ver, para la trompa, como si fueras a dar un beso" 

Sin tener idea de cómo, solamente lo hice, pasó un lápiz labial sobre los labios, se sentía como si fuera una capa de cera de veladora o algo por el estilo, tenía olor y sabor a cereza.


-"A ver, junta y separa los labios muchacho"

Le hice caso y pude apreciar mejor ese sabor a cereza artificial bastante tenue y suave.

Ya solo me pasó un poco de papel de baño sobre la orilla de los labios.


-"Listo, hay wey, que fácil es hacerlo desde afuera, buen rápido y quedé bien guapa, a ver abre los ojos ahora sí"

Los abrí y mientras lo estaba haciendo sentí más pesadas las pestañas, me pasó un pequeño espejo de la mochila y la verdad tenía curiosidad de como había quedado, que la vecina no era tan guapa que digamos, y en la mañana tenía una cara un poco fea. Lo abrí y vi mi reflejo, no podía creer lo que veía, sin duda era todo un gran cambio, las mujeres si que son mentirosas, con solo esos productos y así de rápido dió una mejora muy grande, uno como hombre si es feo, feo te quedas, no podemos hacer esto.

Aquella sombra, delineador y pestañas habían resaltado emsus ojos, se veían más grandes y hasta más brillosos, el polvo hacia que no se viera tan morena y los labios con aquel rojo sin duda hacia resaltarlos, dándole forma y una bonita presentación.

Tome con una sola mano y me tomé el pelo con la del tatuaje, dando una discreta sonrisa. Ver mi reflejo de esta forma si era mucho mejor que en la mañana.

La vecina se dió cuenta de eso y aplaudió para sacarme del shock.





-"Jajaja camara niño, como que si te está gustando esto verdad? Mira nada más como sonríes, pero si estoy guapa, debo de admitirlo"

-"No no es eso, me estaba riendo de como las mujeres hacen trampa con el maquillaje, hasta una mujer tan fea y prieta como tú se puede ver mejor"

Me tomo por los cachetes y me hizo voltear hacia ella con su fuerza.


-"A ver pinche chamaco, bájale de huevos, que me vas a estar insultando, no te voy a soportar que hables así he! Así que tranquilo"

Me dió un poco de miedo, además de que trate de moverme y no podía, me faltaban fuerzas.


-"Lo siento, perdón, no era mi intención"

-"Por está te la paso, ten. Aquí está la mochila, como puedes ver la ropa de chica no suele tener tantos bolsillos, así que aquí está todo lo que necesitas junto con lo que debes de entregar.

-Maquillaje, papel de baño, celular, cartera, llaves y varias cositas para ya sabes, cuando llegue Andrés"

Esas palabras me inquetaron, no lo había procesado aún, pero si esto duraba más tiempo, teniando una vagina es natural que le pase eso. La idea de pasar por eso me dió escalofríos, ya quería que esto terminará para poder regresar a mi cuerpo y no pasar por eso.


Arranco el carro y fue un camino muy intenso, manejaba muy mal, aventaba el carro, se pasaba topes, casi atropella a una bicicleta, toda una irresponsable al volante.


-"Puedes manejar mas lento? Que casi nos matas"

--"Neta? Creo que no se va a poder, tengo prisa, pero si tanto te asusta si quieres ponte el cinturón de seguridad"

Me lo dijo con una cara de burla.


Disgustado, no tuve de otra que ponermelo, lo ajuste a dónde se cierra y fue una mala idea, aquel cinturón que cursaba en diagonal, pasaba justo enmedio de los dos senos, metiéndose entre ellos, remarcandolos y haciendo que se vieran enormes.


Justo en ese momento paso rápido por un tope y sentí como todo se movía de repente, mucha incomodidad y de pronto sentí odio por ella.


-"jajaja órale, que chichotas, hasta te tragaste el cinturón jajaja. Lo siento niño, tenía que hacerlo, gajes del oficio que vienen con ser mujer jajajaja"

No paraba de reír, cai en su broma. Sonrojado ha solo me lo desabroche y continuamos en camino con mi cara de enojado y volteando hacia la ventana.

Avanzamos un poco más y había un accidente así que el tráfico fue más lento, casi íbamos a vuelta de rueda.


-"Oye niño, hablando de cosas de mujeres, si te quitaste la tanga?"

-"Pues obvio, como iba a seguir con esa cosa puesta, como pueden ir con eso como si nada"

-"Ya vez, una vez que les agarras el gusto ya ni se siente, a ver, cuáles te pusiste entonces"

-"Para que quieres saber eso?"

-"No hay pedo, solo quiero ver cuáles agarraste que últimamente he comprado solo ropita sexy, casi no tengo chones normales"


No sabía que responder, y menos al traer unas panties rosas.


-"Andale, bajate tantito los leggins, solo un vistazo."

-"No mames no, como aquí? Estás loca!"

-"No importa no hay nada que no haya visto antes y que quieres, enseñarmelos tú o que te los baje a la fuerza"


Con esa amenaza no me quedaba de otra, voltie a ambos lados del tráfico esperando que nadie viera. Tome con una sola mano por delante los leggings y los baje un poco. Ahí estaba, aquella panties rosa que estaba vistiendo, remarcando la zona pública donde no había nada más que una parte plana y femenina.





-"Hay chamaco, rositas, quien te viera jajaja.

Esos hace mucho no los usaba, pero si están cómodos, casi solo los uso cuando estoy en mis diabolos"


-"En tus que?"


-"Diabolos, días pues, cuando me baja. Te hace falta barrio mijo"


Me subi los leggins de nuevo sintiendo humillación y preocupación.


-"Oye hablando de eso"


-"Ahhh si no te preocupes por eso, ya lleva más de una semana que me bajo, ahorita no hay pedo, tu disfruta"


-"Ok"


Bueno, al menos una cosa menos de que preocuparme.

Continuamos el camino y se estacionó fuera de una estación de metro.


-"Bueno, aquí bajas"

Del asiento trasero saco una bolsa negra que tenían 3 bolsas con cosas.


-"Lo que debes de hacer es ir abajo del reloj y darle las cosas a la neni que te va a esperar y listo, que te pague. Aquí es la primera, las otras dos están en otras estaciones. Solo debes de ir y ya. Ya cuando acabes te regresas y listo"


-"Entonces tengo que subirme a eso?"


Lo señale con disgusto.


-"Pues si wey, que querías Uber y esas cosas de fresas, neta nunca te has subido?"


-"No, nunca"


-"Bueno, siempre hay una primera vez. Todo mételo a la mochila y cuídate. No es difícil solo, mira aquí en mi cartera está la tarjeta, solo pasas a taquilla y le metes 20 pesos con eso pasas. Y ya solo seguir la ruta"


-"No puedes llevarme?"


-"Nah, la gasolina también cuesta como para andar dando vueltas y tengo cosas que hacer"


-"ok... Espera, cosas que hacer? Que vas a hacer con mi cuerpo?"


-"No nada niño, solo debo de ayudar a un compa a una chamba que le salió, no te preocupes te voy a cuidar bien"


-"Más te vale"


-"Oye una cosa más, ya hemos pasado tiempo juntos, y ahora sí es importante, como nos llamamos?"


-"Bueno, yo me llamo Edwin y tú?"


-"Andrea, jajaja que cagado ni nos presentamos tal cual nunca, ah espera un poco"


Por último saco un frasco de la mochila y me rocío con el, tenía un olor muy frutal, dulce y suave


-"Sobres, pa que huelas rico, ya estás niño, nos vemos al rato, ponte chido! Ahí cualquier cosa está mi teléfono, tiene contraseña de huella no creo que haya problema y ahí en la cartera hay dinero y la tarjeta del metro, nomás no vayas a gastarte mucho"


-"Ok, nos vemos al rato, a ver qué pasa"


-"Sale, suerte vecinita Andrea"


Me baje del carro y me dió una nalgada muy fuerte que sonó en seco que hasta me dolió.

Yo ya solo quería que esto terminará, así que me apure y entre por primera vez al metro




domingo, 11 de abril de 2021

Mi vecina la neni #3 ✿

 Me imoresiona todo el apoyo que he recibido, gracias por sus comentarios, así dan ganas de continuar. Aquí les dejo con un capítulo más largo, sin duda mi favorito de todo lo que llevo de esta historia, ojalá no les moleste el exceso de imágenes, pero así me gustó a mi, irla escribiendo en base a las imágenes, a veces puede que no cuadren al 100% pero hago mi esfuerzo por mantener la fantasía. Espero lo disfruten mucho, los quiere... Corrin ❤️

==============================


Descanse un poco y trataba de imaginar que esto simplemente era un sueño muy bien imaginado, seguía apachurrandome por todos lados esperando despertar, cosa que nunca sucedió.

De repente tuve una sensación extrañamente familiar. Sentí una presión en el abdomen, y comencé a darme cuenta de que en medio de las piernas tenía una sensación de incomodidad, rápidamente la presión en el abdomen se hizo más fuerte, recordé que mi madre una vez me dijo que las chicas no pueden aguantar tanto más ganas de ir al baño, así que lo más seguro fue que era eso.


Muy rápidamente me levanté, fui tan rápido como pude al baño. Encendí la luz y ahí me encontré con la taza, rápidamente la abrí, estaba a punto de bajar la tanga para sacar mi cosa y orinar. Las ganas eran tan fuertes que se me salió un pequeño chorro que se deslizó por toda la pierna hasta llegar a los tobillos donde se encontraron con las calcetas coloridas que tenía, emapandolas de ese líquido. Me sentía incómodo y sucio, cuando por más que lo evite, no me pude librar, di la vuelta, baje la tanga y me senté rápidamente, abrí las piernas y a través de ese par de labios empezo a fluir el líquido. Fue toda una sensación de alivio, y a la vez un poco exitante, ya que podía sentir como fluía a través de esa nueva abertura. Sin duda una sensación muy diferente a orinar parado como hombre.


Termino de salir todo y me quedé un poco asombrado apreciando lo que me faltaba de ver. 

Era sin duda una vista muy diferente, como hombre siempre era ver mis jeans hechos bola junto con los boxers debajo junto con mis piernas peludas. Ahora esa tanguita que tenía se sostenía de mis suaves y tersas piernas depiladas y a lo lejos aquellos pies pequeños con coloridas calcetas.


Me quedé viéndolo un poco, tome la tanga y vi la parte de enmedio como tenía una mancha blanca que se veía algo fresca, toque un poco el líquido, y al parecer era lo que sentía hace un rato cuando desperté. Acerque mis dedos, los olí y tenían un olor como de sudor pero con una fragancia peculiar, no olía a sudor oloroso y fuerte de un hombre, sino a un sudor delicado y suave.



Ya totalmente asqueado pero intrigado, tome un poco de papel y me limpie ese líquido blanco, recordando que faltaba una cosa más. Tenía que limpiarme la vagina, "hay por dios, esto es verdad? Tengo que limpiar... Mi vagina?!?!"

Aunque no quisiera no tenía de otra. Tome unos cuantos cuadritos, los enrolle en la mano, me levanté un poco, cerré lo ojos y con una actitud de asco, pase el papel de atrás hacia adelante.

Recorriendo por primera vez desde esta perspectiva aquellos labios húmedos chocando contra el papel suave y absorbente. Trate de hacerlo rápido y aún así fue una sensación muy fuerte el choque de papel con mi carnosa vagina. Por curiosidad tome otro papel y para que quedara bien, lo pase más fuerte y lentamente sobre ella, generando una explosión de placer. Era muy intenso, mucho más que hace rato que jugué con sus pezones. Trate de evitar más cosas placenteras, así que ya rápido tire el papel y me levanté para jalarle a la taza. Tome esa tanga que tenía y la puse en un bote de ropa sucia que encontré atras de la puerta, dónde me quedé viendo cómo habían mucho más ropa interior, jeans y blusas ya usadas por la vecina, todas expidiendo un olor a sucio, pero al igual que sudor, un olor a sucio muy diferente al de nosotros. Un olor entre dulce y encantador, mezclado con agrio y a suciedad en general, pero con un delicadeza muy presente.




Me preocupo ver tantos calzones tan femeninos, sin duda no quería seguir usando uno de esos todo el día.

Me lave las manos, fue algo difícil por las uñas largas, pero las lave bien y pude verlas, ver los dedos gorditos y pequeños, y de nuevo aquel tatuaje que tenía.

Tome un poco de agua y me la heche en la cara, ya estaba descartando al 100% lo del sueño.



Me seque y regrese al cuarto así sin nada abajo, solo los calcetines ,abrí un cajón. Toda la ropa seguia igual de femenina, la moví un poco y saque varias prendas, al final tome la "menos femenina" que encontré. Que fue una truza rosa, ya se, menos femenina y rosa, pero al menos no era una tanga ni un cachetero. 




La tomé e hice bola con el puño dándome coraje, pero no tenía de otra. La puse sobre la cama y era lo más cómodo y menos sexy que encontré. Aún así tenía un pequeño lazo rosado muy muy suave. La puse en el suelo y comencé a subirla por ambas piernas, al llegar a dónde debia de ir sentí como se acoplaba a mi nueva figura, como enmedio de las piernas tenía un corte y doble tela que tenía una textura diferente. La jale y solté para ver si se soltaba un poco más, y fue mi error, era muy pegadita, y tomo la forma redonda de los glúteos de una forma muy natural.



Continué buscando algo para abajo en su closet, no encontraba más que shorts súper cortos, casi del tamaño de mis boxers o menos, y faldas o leggings con estampado. Tome unos leggings negros, que veía que eran lo que más se acercaba a un pants y sin ningun estampado. 


Si pensaba que los calzones eran apretados estaba en un error, estos leggings eran mucho mucho mas apretados. Poco a poco los fui subiendo, por dentro tenían una textura muy suave como de peluche, que se sentía bien al rose de las piernas sin pelos. Al llegar a la parte de arriba subieron por lo elástico, se sentian apretados, pero no era incómodo, tal vez la no tener nada entre las piernas que les estorbe, se adaptaba a la perfección, lo subí hasta el ombligo  donde se agarraron de las caderas. Pase mis manos y podía sentir como se remarcaba el calzon tanto por delante como por detrás, dejando esa marca tan característica de jeans o leggings pegaditos.


Me senté un poco me quite los calcetines que seguían mojados de hace rato, pude ver qué en aquellos pies pequeños con unos dedos muy chiquitos, también tenía sus uñas pintadas de color rojo, pase un pie sobre el otro acaraciendolos entre ellos, sintiendo el como la piel sin pelos chocaba entre si de una forma bonita y que me causaba gracia que yo al estarlos moviendo poder apreciar esos detalles.



Me levanté y ya estaba listo para irme cuando en el piso del cuarto ví una prenda que olvidaba que me faltaba. Ví tirado en el suelo junto con a un short de mezclilla un brassiere de color azul, medio descolorido. Ahí si no podía ponerme a buscar uno "menos femenino" porque en si la prenda era única y exclusivamente de ellas. Lo tome y le di una revisada, no tenía encajes ni nada por el estilo, era liso. 



Pensaba en irme y no ponerme nada, pero todo este tiempo que llevaba, en cada paso las tetas se movían como querían, sin control y me estaba empezando a desesperar y a causar dolor en la espalda. 

Lo levanté y vi la etiqueta, su talla era 34C, no tenía ni puta idea de tallas si era chica o grande, no se para nada como se medían.



Me quite la blusa con la que desperté, y por primera vez pude ver sus senos al aire, es más, son los primeros senos que veía de una mujer real, fuera del porno, el suelo de todo chico, solo que había un detalle, se encontraban en mi pecho!!! El ver cómo la gravedad actuaba y los movía y separaba cada una para un lado me saco de onda, así como al ver esos grandes pezones café claro que tenían una gran aureola a su alrededor. Empecé a tocarlos un poco, los cerraba entre ellos haciendo esa inconfundible línea entre ellos, un gran escote que podía ver. Los apreté un poco más, hasta que se pusieron duros de nuevo, junto con el aire que circulaba al estar totalmente desnudos, me dieron escalofríos y sentí de nuevo calor.



Cuando los solté, di un vistazo al espejo donde veía a la vecina con cara de preocupación, mi expresión de preocupación. 


Me estaba arrepientiendo de verlas al espejo, pero la verdad no sé si porque son las primeras tetas que veo, pero era otra sensación verlas en vivo y más sentirlas y jugar con ellas en carne propia 


Tome aquel brassiere, lo puse sobre la cama y me aventure a ver cómo podía ponermelo.

Por curiosidad tome cada copa con una mano y las puse sobre cada pecho. Electricidad corrió por todo el cuerpo al chocar los pezones erectos con lo suavesito de las copas. Se sentían como esponjas, reaccionando, los estruje con una fuerza mucho mayor, incluso me dolieron de tan fuerte que los apreté, pero se sintio tan bien que me sorprendía que solo eso daba más placer que venirse como hombre en una paja.



Trate de ignorarlo para que se me pasará la calentura, metí ambos brazos en cada tirante, deslizandolos hasta los hombros, solo faltaba el paso final, abrocharlo por detrás, trate de hacer los brazos hacia atrás para poder juntar los broches, cosa que fue muy difícil y raro. Mientras mis estiraba, sentía como se presionaban aún más los pechos que ahora más que nunca se movían como locos. Di como 3 vueltas al rededor de mi para poder enganchar el broche y que se fijarán. 

Luego luego al cerrarlo pude sentir parecido a cuando me llegue a poner una faja cuando me fui un verano a trabajar de cargador, solo que en el pecho.

Se sentía como se enderezaba mi postura para parame más recto, y ahora la presión se encontraba en mis hombros, en los tirantes en dónde caía el peso de ambos senos. Ahora podía ver una gran diferencia de todo el tiempo que estaban al aire libre, todos desparramados, cada uno por su lado, ahora descansaban en sus copas, distribuyendo el peso en ambos lados y se juntaban para formar un escote y vaya que escotazo, sin duda la vecina estaba más pechugona que mi madre.


No sé si era mi idea o me quedaba chico, aparte de mis brazos llenitos y aguados, aquellos senos alcanzaban a salirse un poco, mostrando escote de más.

Hice una pose se fuerza viendo el espejo, dándome risa y curiosidad, viendo a esa mujer con leggings que se le marca las panties, con un brassiere azul que le queda apretado de tan grandes senos y unos brazos y piernas aguaditos y grandes. La vecina podría estar algo prieta, gordita y algo fea de la cara, pero nada que gimnasio y maquillaje pudiera arreglar. 


Me puse de nuevo la blusa que tenía, pero me sonroje y me dió pena ver cómo a través de ella se podían ver los tirantes y un poco el brassiere asomado mostrando un escote prominente, marcando esos pezones como antenas .

Así que busque rápido algo para cubrirme, que ni de loco iba a salir enseñando tanta carne busque lo más cubierto y de nuevo, lo menos femenino fue una playera de manga larga rosada con estampados negros con un diamante y palabras como pink y love. 


Seguia siendo algo femenino, pero al menos me cubría mas. Me lo puse y por último revise sus zapatos, había muchos flats, sandalias abiertas y tacones, lo mejor que encontré fueron unos tenis tipo Converse pero de color rosa. Los tome y me puse la prenda menos rara, unos calcetines blancos comunes y corrientes, me dió risa ver cómo al ponermelos veía como esas uñas rosadas se escondían en esos calcetines y tenis rosados.

Amarre las agujetas, me levanté algo agitado después de que al ponermelos todo todo, aquellos senos, la barriga y las piernas anchas, se aprentaran al hacer esfuerzo.



Tome un respiro, me levanté al espejo y di un par de vueltas. Me sentía extraño pero de alguna forma me dieron ganas de posar, di un par de vueltas aún sorprendido, como si la tipa del espejo fuera una película, hasta que bajaba la mirada y recordaba la verdad. Tome mi cintura con una mano y aunque estuviera algo gordita, si se le marcaba cintura, aún seguía con mi cara de enojado,preocupado. Super extraño era voltear a ver todo eso, más que nada al voltear a ver a la playera, aunque los escondiera, ese par de senos resaltaban estirando la tela y marcando ese monte redondo, al igual que ver abajo a los leggings dónde se veían bien marcadas esas piernotas y sobre todo en medio dónde resaltaban los calzones remarcados en la cintura y el centro dónde ahora no había absolutamente nada, todo era cubierto por esa tela elástica y brillosa.

Di la vuelta antes de salir e igual viendo de reojo asombrado por esas curvas que estaba presentes en todo el cuerpo, destacando aquellas que se formaban en los muslos para dar paso a tremendo par de nalgas, que aunque estaban caídas, seguian formando esa forma tan redonda y carnosa terminando en la cintura.

Me di un último apretón y una nalgada fuerte en la nalga y procedí a abrir la puerta para salir.



Según yo trate de verme lo menos femenino y aún así me miraba como toda una señora, como toda una neni.


jueves, 8 de abril de 2021

Mi vecina la neni #2 ✿

 Gracias por su recibimiento, sin duda me alegra que me reciban de nuevo con los brazos abiertos. Aquí les dejo con el segundo capítulo de esta historia, espero les guste!

===============================


Esto parecía un sueño, uno muy bizarro, voltee a todos lados y pude observar que la casa era muy parecida en cuanto a distribución, solo que lo de adentro estaba acomodado de diferente forma, todo muy viejo, y femenino, eso me recordó algo y me hizo recordar mi situación, porque estoy en el cuerpo de una mujer?

Poco a poco fui recuperando la conciencia. Toque mi cara y efectivamente, mi barba y bigote habían desaparecido, tenía unos labios más carnosos y gruesos, baje al cuello y tenía una cadenita dorada muy delgada y unos aretes a juego. Baje un poco más la mirada y pude ver un gran escote, con un par de senos de tamaño generoso y muy redondos, decidí acercar mis manos y no sé si porque eran muy grandes los senos o mis manos más pequeñas pero fue impresionante sentir como no cabían en las manos, eran muy grandes, comence a amazarlos como si fueran harina para pastel, era una sensación muy extraña, se sentían tan suaves en las manos, pero al mismo tiempo tenía una sensación de firmeza y presión en mi pecho, poco a poco la sensación se hizo más intensa, comenzar a jugar con ellas.




Las aprerujaba como si fueran dos pelotas antiestres, fui sintiendolas cada vez más hasta que fui al centro de ellas y pude sentir como ambos pezones se sentían extremadamente duros, tome ambos y los pellizque bruscamente, era como tener una erección en cada uno de ellos, pero multiplicado 10 veces. 

Me mordí los labios fuerte, baje las manos hacia la cintura, era algo llenita, tenía una barriga bastante amplia, con algunas estrias, no se porque pero me estaba emocionado mienttas tocaba mi barriga dando círculos y pellizcando lo gordito que sobresalia, toda la piel era bastante suave y fuera de que estuviera más oscura, tenía buen estado.

Yo no quería seguir pasando por esto, pero inconscientemente esa calentura y placer que había sentido me hacía continuar explorando.

Pase mi mano sobre el pequeño short de changos, era bastante suave, parecía de peluche. Recorrí con mis manos la parte de enfrente y pude sentir por primera vez en mis 19 años de vida, como no había nada, era totalmente plano. Me sorprendi, pero pues era más que obvio, era una mujer al 100% seguí sobando esa parte por encima experimentado el placer de esa planicie. 

Al sentir algo extraño, me levanté de jalón. Así que procedí, a sentir la parte trasera de lo que contenía ese short. Un par de nalgas bastante prominentes, se sentían algo aguadas, pero aún así tenía buen tamaño, al igual que con las tetas, las apreté fuertemente sintiendo dolor y exitacion, tampoco cabian en mis manos macuradas, me di un par de nalgadas y disfrutaba oír el sonido de la carne golpeandose. Pase mis manos en círculos hasta que sentí en medio de ambos bultos de carne algo que me estorbaba, metí el dedo y no me lo podía creer. Había un pequeño resorte entre ambos, cerré los ojos, me tomé la cabeza con ambas manos y dije con mi nueva y dulce voz "No mames, que no sea lo que creo que es!"

Aún con los ojos cerrados baje los pequeños shorts y los avente lejos. Baje poco a poco la cabeza sintiendo el peso del largo cabello.

Procedí a abrir los ojos y entre en shock cuando confirme lo que penseba hace un momento.

"Es neta?!? Una tanga!!! Es lo que me faltaba!!!"


Aún no lo podía creer. Está vieja dormía en tanga, era impresionante. Ya había visto una que otra vez tangas en modelos y recordé que a veces cuando subía a colgar mi ropa, ahí encontraba secándose varias de estas prendas de las vecinas, lo cual me incomodaba y me daba curiosidad. Pero de eso a estar de repente de un día a otro en el cuerpo de una chica, vistiendo una, era imposible de procesar.

Al recorrerla poco a poco, seguí los tirantes de cada lado donde estaba suspendida y fui sintiendo como se sostenía de mis nuevas caderas anchas, los seguí recorriendo hasta que ambos tirantes intersectaron en la parte trasera en una pequeña y suave tira de encaje que era lo que estaba introducido en medio del trasero y dividiendo ambos glúteos dándoles una forma aún más redonda.


Esto era otro nivel , mi mente estaba a punto de explotar. 

Me di un par de vueltas apreciando el choqie del aire frío con mi trasero, sin duda estaba muy carnoso, sin tanta forma y con algo de celulitis, pero tenía un buen tamaño

Después de rebotar mis grandes glúteos de nuevo, decidí sentarme una vez más. Ahora sintiendo como si estuviera sentado en un par de almohadas, aumentando la altura de dónde estaba sentado. Tan grandes eran que no me había percatado de eso aún.

Ya sentado procedí a acomodarme una vez mas para poder observar la prenda tan femenina que estaba vistiendo, mesiendome con dificultad por el como se meneaban sin control los senos a cada pequeño movimiento.

Y ahí estaba. Aquella planicie que cualquier hombre deseaba, pero conocer, no tener una de ellas, cosa que me estaba pasando a mi.

Di un pequeño vistazo, era tan detallada, tan diferente, tan... femenina, la aprecie y pude ver aquella tela semitransparente como con detallado de flores o algo así, creo había llegado a oír qué es a lo que llamaban encaje baje ambas manos y pase muy delicadamente los dedos sobre el encaje, era muy muy suave, y era muy discreto pero tenía una sensación muy peculiar es remarcar las líneas de ese encaje, que provocaban un poco de cosquillas en aquella zona pélvica sobre la cual se alcanzaba ver entre lo transparente un monte, una pequeña endidura con la forma de W que se encontraba más abajo, toda esa zona estaba cubierta por una paca de bello muy fino, yo también tenía bello en mis testículos, pero aún así me dió un poco de asco. Eso me dió nervios y pena, cerré las piernas de golpe y me sonroje, cerré los ojos y pude sentir como se apreciaba una sensación de humedad más abajo de donde se estaba acercando mis dedos. Aparte se amplificó la sensación de la presión de esas líneas de encaje tan delicadas sobre toda la zona.



Sin duda estaba perdiendo el control, estaba a punto de levantar la tanga para encontrarme con lo que ya sabía que tenía pero estaba aún por describir. Cuando de repente escuché como tocaban fuertemente la puerta. No sabía que hacer, así que fingi no estar y guarde silencio.

Tocaron otra vez con más insistencia. Planeaba seguir escondiendome cuando de repente escuché una voz, mi voz 

-"Camara niño, ya se que estás ahí, abreme y te explico todo"

-Me sorprendí completamente, era exactamente mi voz, tome el short que había lanzado, me lo coloque rápidamente para no levantar sospechas. Cuando me acerque a la puerta, lo ví por primera vez. Ahí estaba en un espejo, el rostro, el rostro de la vecina molesta que tanto me caía mal.

No no no, no podía ser posible. Era totalmente ella, me pare frente al espejo y se podía la cara de la vecina, bueno, ahora mi cara con una gran sorpresa, hice un par de gestos y el espejo los replicaba totalmente, me pellizque de nuevo los cachetes grandes que tenía y me dolió, incluso ver mis nuevos brazos aguados y tocarlos sentí como esto definitivamente no era un sueño.

-"Ya niño, ya abreme antes de que venga alguien de chismoso"

Me acerque a la puerta, agarre el pomo mientras veía mis uñas de colores. Tome un gran respiro y abrí la puerta. Ahí estaba, sin duda era yo, bueno, mi cuerpo, mi ex cuerpo ahí parado en la puerta, desde esta perspectiva tenía que voltear hacia arriba para verlo, era mucho más alto. Quedé impactado al verlo como si nada, completamnete arreglado con ropa diferente al día de ayer.

-"Buenos días vecinita, que guapa, puedo pasar?"

-Me dijo mientras me giñaba un ojo.

-No supe cómo reaccionar así que me moví a un lado y lo deje pasar para cerrar la puerta.

Se fue directo al sillón donde había despertado, se acomodó de una forma muy segura, subiendo los pies a la mesita que estaba enfrente.

-"Entonces como vez niño? Que aún no entiendes?"

-"Que chingados nos hiciste maldita vieja"

-"Yo? Si tú fuiste el que se veía de la patada y re bien que decías que querías cambiar tu vida, bueno, pues aquí está el resultado."

-"Hija de la chingada, tus pinches productos, fueron las gotas verdad? Eres una bruja o que chingados?"

-"Digamos que tengo contactos."

-"Hija de la chingada, porque crees que me gustaría ser una vieja prieta, gorda y naca?!?, Yo quería cambiar mi vida pero por la que tenía antes, no por una neni como tú!!!"

En ese momento la vecina se levantó en mi cuerpo, me tomo de ambos brazos con fuerza, sin duda este cuerpo era muy débil, no podía soltarme ni hacer nada.

-" Hey hey hey, a ver morrito, si se ve que eres todo un niño fresa, pero tampoco es para ir te pongas así, está bien que no soy una modelo, pero no es para insultarme así. Además, la única vieja prieta y gorda que veo, eres tú."

Tomo mi cara con una sola mano presionando mis cachetes y labios para darme vuelta la cabeza y ver al espejo, desgraciadamente tenía razón, ahora ella tenía el control de mi cuerpo y yo estaba encerrado en esta horrible situación dentro del cuerpo de una naca.

-"Si quieres recuperar tu cuerpo lo podemos hacer, pero debes de relajarte amigo. No lo veas cómo algo malo, disfrútalo, veelo como un descanso de tu vida cotidiana y una forma de interactuar con el barrio desde otra forma, igual y te encariñas y te gusta, además, puedes disfrutar este cuerpecito que tengo, que no es el mejor pero es muy placentero, ver cómo es ser una señorita, te puede llegar a gustar, te lo digo por experiencia"

Me soltó, me dió una vuelta como de baile y me dió una nalgada. Yo solo me sonroje y recordé lo que había sentido hace rato cuando me explore.

-"Tu tranquilo y yo nerviosa, mira, tu diviértete y yo aquí te cuido mi cuerpo, hoy tengo un par de entregas que hacer, está relax. Ya en la noche puedes hacer lo que quieras. Distraete un poco, total, todos me conocen en el barrio, puedes salir sin pedos y todos te van a tratar chido" 

-" Y bueno, que dices, quieres fingir ser yo por unos días?, Bueno te lo pregunto por tontería porque se que no te queda de otra"

Y tenía razón, está vieja estaba loca, pero debía seguirle la corriente para que accediera regresarme mi cuerpo

-"Bueno, pues ya que. Pero no hagas nada malo con mi cuerpo, tu maldita!"

-"Jajaja no como crees muchacho, solo quiero salir a pasear por ahí, eres un morro de 19 años, güerito, de carita y por lo que pude sentir, tienes un buen pedazo de carne allá abajo"

Me sonroje de nuevo, está vieja solo quería provocarme.

-"Ándale, ve y cámbiate, te llevo al primer encargo y de ahí te sigues con los demás"

-"Pues ya que!, Oye creo que necesito ayuda, por si no lo vez, nunca he sido una mujer, no se que me debo de poner o que!'

-"Ah si cierto, a ver ven!"

Me tomo me la mano y me llevo a si cuarto, me senté en la cama y comenzó a sacar mucha ropa de los cajones. Tenía demasiada variedad, vestidos, mallones, faldas, shorts, blusas, zapatos.

-"Dame lo menos femenino que tengas, no creas que me voy a poner una falda o algo de eso. Y por favor, unos calzones normales, que está cosa es súper incómoda, en serio las chicas duermen con esto?"

-"Ahhh si cierto, ayer me deje la tanga jajaja, lo siento muchacho, venía medio peda y me la dejé, no sé cómo se te haya marcado por tenerla toda la noche, espero no lo hayas dejado mojadita jajaja."

En eso saco mi teléfono y contesto unos mensajes. 

-"Bueno niño, ahí ponte lo que quieras, al fin nomás vas de rápido a entregar unas cosas. Deja bajo a calentar el carro de mi compa el Jonny que me prestó y ahí te llevo."

Salió rápido de la habitación y ahí me encontraba con un dilema al ver todo su closet y las prendas que sacó con tantas prendas tan diferentes. Que debería de ponerme?





lunes, 5 de abril de 2021

Mi vecina la neni #1 ✿

 Hola a todos, se que deje morir el blog muy feo. Pero siempre he seguido por aquí, desde las sombras. He tenido un poco de tiempo libre e inspiracion. Espero les guste la historia que he estado haciendo, es un poco diferente a lo que había hecho, tengo unos cuantos episodios. Ojalá la lean y alguno comenté a ver si me animo a seguir con esto aunque sea esporádicamente. Un gran saludo a todos


=============

Soy Edwin hace unos meses cumplí los 19 años. Hace tiempo nos mudamos a un nuevo barrio, a mis padres no les estaba llendo bien con su trabajo y nos tuvimos que cambiar de casa a un lugar donde la renta fuera más barata. Era un barrio más humilde dónde habían personas más peligrosas y sin estudios, para no decirles nacos. 

Todo esto estaba siendo un tormento para mí, cada que salía me encontraba con chavos fumando marihuana o tomándose su caguama sentados en las banquetas, ni ganas de salir me daban.

Siempre que salía, una vecina de esas "nenis" trataba de tener contacto conmigo. 

Yo trataba de evitarla pero era muy insistente, se ponía en la entrada del departamento y siempre trataba de hacerme la plática. Ella era algo gordita, se didicaba a vender cosas piratas como ropa, bocinas, maquillajes y esas cosas que suelen comprar de moda como peluches de pulpo.

En varias ocasiones trataba de venderme perfumes, que por supuesto, eran piratas y no me interesaban. Ya estaba harto de ella, un día que me fue mal en la escuela, venía de regreso y un par de sujetos me amenazaron y me quitaron los únicos 200 pesos que me quedaban. Fue un pésimo día, y para rematarla, la vecina me detuvo en la entrada. 


-"Que paso vecinito, como anda?"

--"Mira, tuve un pésimo día, por favor cállate y déjame entrar a mi casa!"

-"Hay vecinito, porque me habla así, mire, justo aquí tengo este liquidito que le puede ayudar, se le pone unas gotitas a una tasa de té y veera como se soluciona todo"

--"Por favor, deja de estar chingando, una vez más con tus productos piratas de mierda, además me robaron, no tengo dinero y ni me interesa compraré nada, quítate porfavor!"

-"Hay no se enoje joven, no osea preocupe, estás van pro mi cuenta, usted tomeselas, se ve que las necesita"

Ya para que me dejara en paz tome su frasco y me metí a mi casa.

Mis padres no estaba y me moría de hambre, me encerré a mi cuarto sintiéndome miserable. Avente mi mochila, me acosté y me puse a ver mi celular. Mire viejas fotos cuando nuestra vida era mejor, todos sonriendo, sin problemas económicos, todos juntos y felices. Sin duda detestaba mi vida, avente el teléfono y me puse a llorar, deseando con todo mi ser que no vida cambiará, estaba harto de estas semanas dónde todo se fue al carajo desde que nos mudamos.


Aún tenía hambre, pero me sentía devastado, simplemente me hice un té de tila, de dos que compraba mi mamá, para relajarme. Mientras lo hacía recordé las gotas que la vecina castrosa me había dado. Las leí y decía "gotas cambia vida, si quieres un verdadero cambio, tomate estás gotas, remedia todas tus penas y librate de tus pesares" supuse que eran de esos productos milagro que vendían que según solucionaba todo, como pomadas o plantas milagrosas que casi siempre eran estafas. Pero no tenía qué perder, así que mientras le hechaba azúcar a mi té, le heche unas cuantas gotas.


Sabía delicioso, no me imaginaba que tuviera un sabor tan dulce.

Me lo termine en un par de tragos y me dirigí a mi cama.

Poco a poco fui sintiendo calor y empecé a sudar. Cómo me relajo mucho, tome mi teléfono y mire mi Instagram, chicas tan hermosas por todos lados, que no hacían nada más que lucir lindas, sacarse fotografías y con eso ya tenían su vida arreglada, sin preocuparse de nada. Sin duda las envidiaba en este instante. Ya mis ojos se cerraban, así que puse a cargar mi teléfono y me dormí. Esperando que mañana fuera un día mejor.


El día siguiente amanecí con un fuerte dolor de cabeza. De alguna forma sentí dolor en varias partes de mi cuerpo. Me sentía más cansado, como si no hubiera dormido agusto.

Levanté las cobijas y voltee a dónde siempre a ver mi teléfono, no lo sentí así que abrí los ojos, cuál fue mi sorpresa que estaba acostado en un sillón café. Fue raro ya que nuestro sillón era verde. Procedí a sentarme y me costó mucho trabajo levantarme, me sentía muy pesado. Cuando me senté sentí incomodidad, me picaba la cara, en ese momento me quite el pelo castaño oscuro que me estorbaba, pero espera... Porque me estorba el pelo si lo tengo corto?

Me jale el pelo y me dolió, todo se descontroló en cuanto ví mis manos, eran más oscuras, y no solo eso, sino que tenía las uñas maricuradas, con diseños y colores muy exagerados, las voltie un poco y pude ver qué tenía de lado un tatuaje de una ancla. Supe que algo andaba mal, así que me senté bien y desperté completamente, no me lo podía creer, estaba vistiendo una pequeña blusa rosada y un muy corto short azul con dibujo de unos changos que no se podía apreciar bien por lo corto y porque me estorbaban los senos, espera! Porque tengo senos?!?! En ese momento estaba congelado, como era posible esto, grite muy fuerte y de mi gargantao sonó una voz muy femenina. "Que chingados?"