-Buenos días familia, cómo están?
Nadie me respondió.
Me levanté a servirme como siempre un Corte de carne y ensalada.
Regresé a la mesa y note que mi hija solo se había servido ensalada como siempre. Comencé a comer, me terminé la ensalada, pero no pude con la carne, me sabía muy mal y solo pude darle unos bocados hasta que me llene por completo, no podía comer más. Le di a mi hija lo que me sobró y cuál fue mi sorpresa que lo devoró como tigre, parecía que le encantaba. Pedí una copa de vino y me la negaron.
-Lo siento señorita, no puedo servirle vino, aún se ve menor de edad.
Ya que todos terminamos de desayunar, por fin hablamos.
-D: Bueno familia, es el último día que nos queda de vacaciones, así que solo iremos a la última playa, dejaremos el auto que rentamos y tomaremos el vuelo de regreso.
Todos asentimos con la cabeza, cada quien regreso a su cuarto y tomamos nuestras maletas.
Estábamos afuera cuando mi hija me dió un tirón y me jalo.
-Papa, ayúdame, tengo que ir al baño, cómo le hago?
-Para que me preguntas Dulce, es muy fácil, solo ve ahí, saca a mi amigo y deja que todo fluya.
-No lo se papá, aún no estoy lista para eso. No puedo creer que tenga que usar tu cosa.
-Si tienes la necesidad hazlo, no te preocupes.
Así espere a mi hija afuera del baño junto con Ángel.
-Te han gustado las vacaciones Ángel?
-Emmm.... Si claro Hermana. Aunque me siento diferente.
-A que te refieres?
-No lo se, olvídalo.
En ese momento salió mi hija con mi short un poco chorreado, se acercó a mí y me dijo "vámonos hija".
Pasamos a entregar la llave y le pidieron que firmara unos papeles para poder irnos. Ella muy asustada no sabía qué hacer, así que me pasó los papeles sigilosamente y los tuve que firmar.
Nos fuimos por el auto que rentamos, entramos los 4 y me senté en el lugar trasero donde siempre se sentaba Dulce. No sabía porque no arrancaba, así que antes de encenderlo me dijo. "Vamos hija, llévatelo"
Recordé que aún no sabía enseñar a manejar a Dulce, por lo cual no tenía la idea ni de como encenderlo.
Cambiamos de lugar, me senté en el lado del piloto, note que quedaba muy lejos del volante y los espejos no estaban a mi vista, así que acomode todo para manejar, aún así los pedales me quedaban algo lejos, me abroche el cinturón y pude sentir como hacía presión en los pechos de mi hija, se sentía muy bien, pero algo incómodo después de un rato. Maneje como siempre, todo el tiempo sentía el culo en el asiento muy suave, como si tuviera un par de almohadas en el asiento, pero no era así, simplemente era el trasero me mi hija en él. Cada tope que pasábamos podía sentir el rebote de mis pechos entre ese cinturón, algo que me desconcentraba al manejar, aparte que su largo cabello se me atravesaba en medio de la cara, lo cual me impedía ver con claridad. Por eso mismo, en una ocasión por poco me pasaba un alto, un auto se dió la vuelta ahí mismo y me grito. "Tenías que ser vieja, no sabes manejar" Yo me sentí enojado, pero apenado a la vez, no supe que hacer así que lo ignore y seguí mandando. Llegamos a la playa, así que nos estacionamos, tomamos las cosas y nos fuimos a un par de mesas a la orilla del mar, en donde dejamos nuestras cosas mientas mi Hija y mi hijo entraron con emoción a nadar, Yo y mi esposa, ahora mamá, nos quedamos ahí en la orilla y nos acostamos en unas camillas que había
esta historia es absolutamente genial y mi favorita de tu blog, realmente me gustaría que publicaras mas seguido capítulos de esta historia :)
ResponderBorrarGracias, trataré de hacerlo, ya que no tengo más escritos, pero la continuaré :)
BorrarLa mama y el hijo tambien avian cambiado de cuerpos jajajajaja que grasioso sigue asi
ResponderBorrarMe esta encantando la serie, jajaja a ver que pueden conversar de "madre a hija", subela mas seguido
ResponderBorrarQue bueno que les gusta, la iré avanzando poco a poco. Lo tendré en cuenta para el próximo capítulo
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